Esta obra exterior es parte de la defensa del Arsenal, que debía funcionar como “Ciudadela” de la fortificación ferrolana.

Rodeaba todo el perímetro con agua, siguiendo una línea quebrada adosada a la parte exterior del muro del Arsenal. Tiene una anchura de 10 m y 5 m de profundidad.

Esta obra hidráulica tiene el mismo tipo de cimentación que los muelles (cajones de mampostería) y se diseñó con los cálculos matemáticos de los empujes de las aguas sobre sus murallas.

Fue iniciada por Marín en 1752 en el Arsenal del Parque y continuada desde 1755 por Llobet, completándose a partir de 1765 bajo la dirección de Sánchez Bort en el Arsenal de los Diques.

Aunque hoy se ha perdido una cuarta parte, entre la Puerta del Dique y el Puerto Chico, y continúa soterrada la mayoría de su fábrica, se ha recuperado su vista antigua en un tramo de 150 m junto a la Puerta del Parque, solamente hasta la cota de marea, dejando al descubierto la escarpa de cantería bajo el cordón magistral en unos 2’5m. Además, se ha rebajado la muralla hasta su altura original y se ha rehabilitado la contraescarpa.

Esta es una obra esencial para comprender la defensa del conjunto histórico.